Eva Hernández, Socia Responsable del Departamento de Derecho Laboral de Escalona & de Fuentes, participa en una información publicada por The Objective sobre las modificaciones “por la puerta de atrás” de la reforma laboral.
En ella, Eva Hernández opina que estos cambios normativos dan lugar a “un sistema menos garantista para el empresario que el que tenía anteriormente y, además, al margen del diálogo social”. Se refiere en su argumentación “a la Ley 15/2022, con la que se crea una autoridad independiente para la igualdad de trato, pasando por la Ley 1/2023, en la que se establecen unos incentivos, que en general son de menor importe, incluso se reducen sustancialmente las ayudas a la contratación, a favor de la compañía, y, sobre todo, mencionar la Ley de Empleo, 3/2023, donde se introducen importantes modificaciones en materia de falsos autónomos”.
Sobre esta última norma, la Ley 3/2023, afirma que “es muy trascendente que se haya incluido al margen de la negociación con la CEOE”. Y lo razona: “El sistema anterior era mucho más garantista para el empresario. Llegamos a la situación de que cuando llega la inspección de trabajo levanta un acta de falsos autónomos y la empresa tendrá que regularizarlos de manera inmediata. Anteriormente, el empresario no estaba obligado a reconocer la relación como laboral ni tampoco hacerse cargo de las cotizaciones de los trabajadores hasta que un juez dictaba lo contrario. Ahora mismo, el empresario tiene que iniciar el procedimiento judicial y, si no está de acuerdo con el acta administrativa, en todo caso, no paraliza el proceso de ejecución del acta de la inspección. Es decir, sin perjuicio de que todavía no sea firme, el empresario tiene que, automáticamente, pasar a regularizar al falso autónomo, lo que tiene mucha transcendencia desde un punto de vista práctico, sin perjuicio de que sea correcto o no, ya que al empresario le obliga a dar el alta a esos trabajadores sean o no falsos autónomos».