El diario ABC ha contado con la opinión experta de Siro Barro, Socio responsable del área de Derecho Fiscal de Escalona & de Fuentes, en una información sobre la desaparición de un importante número de grandes contribuyentes tras la entrada en vigor del gravamen a las grandes fortunas.
Barro destaca que los contribuyentes con capacidad para modular sus ingresos, como los dividendos, han utilizado estrategias de planificación para reducir su carga fiscal total, aprovechando el límite que impone el escudo fiscal. “En el momento en que se aprueba ese impuesto, el contribuyente revisa sus rentas y, si puede, tratará de reducir sus rendimientos, recortando, por ejemplo, el dividendo que percibe de su empresa, para optimizar el escudo fiscal”, explica. Ese escudo impide que la factura global por IRPF, Patrimonio y gravamen a grandes fortunas supere el 60% de las rentas del contribuyente, por lo que, a menor renta, menor factura en grandes fortunas.
Su análisis aporta claves esenciales sobre cómo estos cambios normativos pueden afectar a la recaudación estatal y al comportamiento fiscal de los grandes patrimonios.